Uno de ellos peca de (re)tardado. Le hizo falta un sexenio para firmar el decreto de una ley anti lavado de dinero. Cualquiera en su sano juicio, hubiese promulgado esa ley antes de iniciar una guerra, a sabiendas que si paralizas lo económico, paralizas a sus ejércitos (de los malosos). Pero, nooo, la cosa es calmada, decía Clavillazo; este lo único que sabe decir es Haiga sido como haiga sido.
El otro, al más puro estilo de Maximiliano, promete o se compromete a cosas antes de que se aprueben.
Agradece Feijóo a Peña Nieto el atípico e inaudito
apoyo a Galicia
Reconoció la ratificación de contratos, aun antes de que el mexiquense asuma el poder.
Faltaba más, faltaba menos. Todo sea por ayudar a nuestros antiguos (y actuales) patroncitos. A sus mercedes. Al fin que nos van a retribuir, aumentándonos las tasas de interés los del Santander, o negándonos la carta de invitación para visitar la madre patria. Rediez.
Dios nos agarre confesados a partir del 1 de diciembre. Esto tiene pinta de que va a pintar como José Luis Cuevas.
Para los no nativos, pregúntenle a cualquier mexicano ¿cómo pinta José Luis Cuevas?
1 commentaire:
Y.... cómo pinta puesnnnnn????
Besos virtuales!!!!!
Muuuuuaaaaaaacccccckkkkkkkkk!!!
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