jeudi, novembre 19, 2009

Las Becarias del Conaculta

Dos precisiones. Una, el término no es mío. En alguna ocasión lo escuché y me gustó, se me hizo muy apropiado, jaja.

Dos, en el tiempo que llevo blogueando me he dado cuenta que así como los blogs sirven para que algunos se enamoren, en ocasiones son manzana de la discordia. Provocan pleitos, peleas, demandas, divorcios, amenazas, rompimientos sentimentales, etc.

Recordarán el afamado blog en donde el galán andaba con dos chavas al mismo tiempo y por purititta pinche casualidad, de repente se dieron cuenta ambas de su respectiva existencia y de que su galán era un goloso, je.

Últimamente leo uno en donde buscando opiniones de autos, me encuentro con una historia sentimental en la cual la chava se enamora de un pendejo denominado Jota (de joto, jaja), y el resultado es que la chava tuvo que borrar una parte de su blog, ergo de su vida virtual.

La historia comienza en julio de 2009, aunque el post de mi interés inicial fue de junio de ese mismo año.

¿Para qué tanta pinche precisión? je. Por andar de preciso ya hasta me estaba yo olvidando del motivo.

Bueno, el caso es que la línea de este blog ha sido de dulce, de chile y de manteca. Por purititas cuestiones de seguridad. A mí más que me gustaría decirles la puritita verdad: que soy guapo, galán y que en donde me paro todo mundo voltea a verme. Pero yo sé que algunos bloggers machos no soportarán tanta virilidad y seguramente atentarán contra sus vidas. Por eso tengo que disfrazar mi realidad: no se crean, soy chaparro, panzón y betabel.

Decía yo que por cuestiones de seguridad debe haber cosas reales, semi-reales y ficticias. Imagínense que de repente la pexipata se entera del blog y peor aún se entera de que me gustan las mujeres. Divorcio seguro ¿n'est-ce-pas?

Por tanto es mi firme deseo que algunos posts deban leerse entre líneas. Como este.

Figúrense que una parte de mi personalidad es de tipo voyeur. No saben como lamento que cuando tenía yo 18 años no tenía yo una cámara digital que grabara video. Eso me hubiera permitido perfeccionarme en algunas cuestiones.

El caso es que en estos últimos años llego yo con las becarias del Conaculta y les digo: "me permites sacarte unas fotos". Porque he de admitir que me gusta pedir permiso, tampoco es para tomar fotos sin consentimiento. Las fotos son para consumo personal. Nunca subiría yo una foto o video al "U" o al "hamster". Si en alguna ocasión, las subí al blog, no delataban nada de la personalidad o rasgos faciales de la becaria.

Por lo general, la becaria "dizque" espantada por tal petición y atrevimiento dice: "noooo, ¿como crees? imagínate que las ve mi papá (o mi mamá, o mis hermanos, o mi novio o mi esposo) y me mata". A fuerza de insistir algunas acceden. "Bueno, pero sin que se me vea la cara". En esa misma sesión o en la siguiente, de repente acceden a que sí se les vea (y no únicamente la cara).

Siempre me he asombrado de ello. Supongo que en parte es por vanidad. A mí también me gusta verme sobretodo en video.

¿Qué hacer con la videoteca? ese sí es un verdadero problema. Ojalá ya se hubieran inventado las memorias de 100 Gb, en forma de implantes subcutáneos. La otra pudiera ser guardarlas en el culo o debajo de la lengua, pero es bastante incómodo ello. Debajo de la cama no es práctico. Aún recuerdo cuando mi madre haciendo limpieza, descubrió mi colección de encueratrices en las revistas Ja-já y todas fueron a parar al boiler, jaja.

Si alguna becaria del Conaculta me lee, debo hacer otra precisión. Las fotos o videos nunca serán del dominio público. Tal vez las meta yo en una cápsula y las envíe yo al espacio. Cuando algún marciano o venusino las encuentre seguramente exclamará:

"Ayyyy, weeyyyy, están buenísimas".

O bien:

"Ayyyyy, weeeyyyy, seguramente esa noche andaba repedo el pexipato. Están federalíiiiisimas".

Cuestión de gustos. Como todo en esta vida, jeje.

J'ai besoin d'un secret, reprit M. Ouine, j'ai le plus pressant besoin d'un seul secret, (...) ... Un secret,comprenez-moi bien, mon enfant, je veux dire une chose cachée qui vaille la peine d'un aveu − d'un aveu, d'unéchange, une chose dont je puisse me décharger sur autrui.
Bernanos, Monsieur Ouine, 1943, p. 1555.

2 commentaires:

jess a dit…

Eso del cuerpo humano es un albur.

... Pero sí, el hecho de que alguien más muestre interés por conocerlo, siempre eleva el ego.

Y jajaja! clásica!! todas nos hacemos del rogar en un inicio jajaja!

Besos virtuales!
Muuuuaaaacccccckkkkk!!

white a dit…

JAJA eso de la pexipata es genial,,,nooooo como que el divorcio,,,,pero si eso de que a los hombres les gusten las mujeres es normal que no?