mercredi, août 12, 2009

El perro de las dos tortas

Hoy he recordado esa expresión de "Quedarse como el perro de las dos tortas" al leer el inicio de la segunda página de un cuento o novela de Guiseppe Tomasi de Lampedusa titulado "Lighea".

Ignoro si el príncipe usó la expresión en la edición original o es una libertad tomada por el traductor. Poco importa.

Lo que sí es importante es que es casi seguro que todos hemos pasado por esa situación, la de ambicionar dos mujeres, dos trabajos, o dos cosas al mismo tiempo. Y quedarnos sin ninguna.

Lo bueno es que hay muchas tortas, aunque también muchos perros. Je.

5 commentaires:

MIN... a dit…

Solo dos???

yo mientras mas tortas veo mas hambre me da y mas quiero!

jess a dit…

Pero mínimo al perro de las dos tortas, le va mejor que al asno de Buridán.

Besos virtuales!
Muuuuuuuuaaaaaaaacccccckkkkkk!!!

La Balada Despeinada a dit…

bueno.. pero es que aveces una torta no es suficiente.. jejeje

PD... ya vi la de GI Joe.. y tambien me gusto.. pero me acorde de ti cuando vi la cuenta de los boletos y todo... jajja

pez a dit…

quiero pensar que el asno de Buridán, forma parte de alguna asignatura o estudio de caso que llevaste en la facultad de Derecho, o en la especialidad

a mí me pasa algo similar en el trabajo, no tengo mucho, pero el que tengo, no sé cual es el más importante o urgente, por lo mismo dejo todo para mañana, jaja

oui, je le sais, je suis un âne

Rogelio Segovia a dit…

me acordé de algo que posteeeeé:

"De pequeño, en alguno de los libros gratuitos de educación básica repartidos masivamente por las autoridades educativas del País, leí -de Esopo- la Fabula del Perro y el reflejo en el río -tropicalizada como “El perro de las dos tortas”-. Con una moralina moraleja que análogamente prédica: “estéseme quieto ahí y aguánteseme con lo que tiene”.
.
Pero que pasa cuando uno simplemente no quiere ni su pedazo de carne ni la del reflejo del río.
.
Que tal si en la fabula el perro abrió el hocico no por que codiciaba el trozo de carne que equívocamente vio en su reflejo, sino más bien por que no deseaba ni el suyo, ni el del reflejo; y precisamente al ver ambos, decidió que incluso ya no quería el trozo que tenía con el"

http://delaporra.blogspot.com/2009/05/de-lo-que-uno-puede-ser-y-de-lo-que-no.html