Va de Nuez

A ver, se me figura que luego no me entienden, no me comprenden, jaja.

Cuando recomendé la película "Déjame Entrar" (Let the right one in) (Swedish: Låt den rätte komma in) , no era una opción entre ver ésta o las de Crepúsculo/ Luna Nueva. De hecho no he visto ninguna de estas dos últimas. Es cierto que ya las tengo, al igual que La Reina de los Condenados, y la de Entrevista con el vampiro. Actualmente estoy consiguiendo la de Bienvenidos a Zombieland.

Si acaso recomendé la de Déjame Entrar fue porque ya la ví y me gustó. Como alguien dice en el enlace, no solo es una película de vampiros. Va más allá. Trata acerca de la amistad y tal vez un poco del amor. Trata también acerca del acoso que sufren algunos niños o niñas en sus escuelas.

Lo cual va de la mano con esta nota, sino de actualidad, por lo menos vigente, acerca del cyberbullying.

Hay una escena en donde el niño Oskar le atiza con un palo a la cabeza del acosador. En ese momento la cámara enfoca el rostro de Oskar, como toma aire y levanta orgullosamente el mismo. Yo creo en ese preciso momento muchos se sienten reivindicados (¿revindicados?).

Digo, yo sé que la violencia genera violencia. Pero también llega un momento en que te hartan o te rompen las pelotas.

En la nota del cyberbullying también hablan de: "[...]También hay quienes están conscientes de que usan Internet para la promoción sexual, y lo hacen para sentirse importantes; [...]".

Yo también (lo admito, soy humano) quiero sentirme importante. Por lo mismo he decidido publicar en este post la foto del tribilín y de como algunas "cosas" llegan a inflarse. Si a alguna de las bloggers femeninas que visitan este blog se les antoja, pues ese ya no es mi problema ¿o no? Quien les manda ser golosas. Si a otras les disgusta ver esto o entran en "shock", pues están a tiempo de no ver al tribi. Sobre advertencia no hay engaño.