SONETO A CRISTO CRUCIFICADO
No me mueve, mi Dios para quererte
el cielo que me tienes prometido,
ni me mueve el infierno tan temido
para dejar por eso de ofenderte.
¡Tú me mueves, Señor! Muéveme el verte
clavado en una cruz y escarnecido;
muéveme ver tu cuerpo tan herido;
muéveme tus afrentas y tu muerte.
Muéveme en fin, tu amor, y en tal manera
que aunque no hubiere cielo, yo te amara,
y aunque no hubiera infierno te temiera.
Ni me tienes que dar porque te quiera,
pues aunque lo que espero no esperara,
lo mismo que te quiero te quisiera.
NO ME PESA SEÑOR
No me pesa, señor haber faltado
por el eterno mal que he merecido
ni me pesa tampoco haber perdido
el cielo como pena a mi pecado.
Pésame haber tus voces despreciado
y tus justos mandatos infringido
porque con mis errores he ofendido
tu corazón Señor por mi llagado.
Llorar quiero mis culpas humillado
y buscar a mis males dulce olvido
en la herida de amor de tu costado
quiero tu amor pagar agradecido
amándote cual siempre me has amado
viviendo contigo arrepentido.
http://es.geocities.com/oracionescl/abba/cristocrucificado.htm
3 commentaires:
Seguimos aferrados al consuelo de un Dios lleno de amor y comprensión. Un abrazo con mucho cariño Pexi.
.....
Auchhh.... cada día me preocupas más mi Pez....
Bsssss..
Mafalda
¿Porque esos sonetos pecesito?
Me da la impresión de que te sientes culpable por algo.....y no es precisamente ante la sociedad....
Si estas triste echale ganas....te mando un abrazo compartido...
Enregistrer un commentaire