Principio de Peter

Continuando con la serie de esta semana: "La princesa está triste, ¿qué tendrá la princesa?"

Oh, pus esta semana he andado medio agüitadón. Ahhh, noooo, jajaja. El pexipato no es una princesa, es un príncipe o un sapo en vías de convertirse en burro. ¿Creen que un burro llegue a Marte? A las bloggers, of course. Bloggers puñaleiros, abstenerse, je.

Me permito transcribirles este chiste tomado (pirateado) de un foro (

http://www.hispaseti.org/foro//viewtopic.php?p=42289&sid=be68095f4df3373081e3549920fb0f63 . Tucker el que "subió" el chiste sabrá disculpar) (aunque muy probablemente él lo tomó de otro lado también):



Un carnicero estaba atendiendo su negocio y se sorprendió al ver entrar un perro.

Lo espantó, pero el perro volvió enseguida.

Nuevamente intentó espantar al perro, cuando se dio cuenta de que traía una nota en el hocico.

Tomó la nota y leyó: ¿Podría mandarme 12 salchichas y una pierna de cordero, por favor?

El perro también traía dinero en el hocico, un billete de 50 euros.

Cogió el dinero y colocó las salchichas y la pierna de cordero en una bolsa en el hocico del perro.

El carnicero estaba muy impresionado y como ya era hora de cerrar el negocio, decidió seguir al perro.

El perro comenzó a bajar por la calle cuando llegó a un semáforo.

Depositó la bolsa en la banqueta, brincó y apretó el botón para cruzar.

Esperó pacientemente con la bolsa en el hocico a que se pusiera en rojo para poder cruzar.

Atravesó entonces la calle y caminó hasta una parada de autobús, con el carnicero siguiéndolo de cerca.

En la parada, el perro miró hacia el horario y se sentó en el banco a esperar el autobús y cuando llegó uno, tras cerciorarse de que no era el autobús correcto, siguió esperando.

Otro autobús llegó y volvió a mirar.

Vio que ese era el correcto y entró.

El carnicero, boquiabierto, siguió al chucho.

Tras quince minutos de viaje el can se levantó y, erguido sobre las patas traseras, tocó el timbre para descender, todo ello con la bolsa en el hocico.

Y bien, carnicero y perro fueron caminando por la calle, hasta que el perro se detuvo en una casa y puso las compras en el banco de la puerta.

Entonces, retirándose un poco, corrió y se lanzó contra la puerta.

Repitió la acción varias veces.

Nadie respondió en la casa.

El perro rodeó la casa, saltó una cerca y fue hasta la ventana; allí comenzó a tocar con la cabeza en el vidrio varias veces.

Regresó a la puerta, abrió un hombre, y comenzó a golpear violentamente al perro.

El carnicero corrió hasta el hombre para impedirlo, diciéndole: -¡Por Dios amigo! ¿Qué es lo que está haciendo? ¡Su perro es un genio!

El hombre respondió: -¿Un genio? ¡Ya es la segunda vez en esta semana que el muy mamón se olvida las llaves!



Moraleja: Puedes continuar buscando la excelencia en tu trabajo, pero a los ojos de un jefe incompetente, siempre estarás por debajo de sus expectativas.



Alguien denominado Cabezón respondió: Este cuento confirma el Principio de Peter: "En cualquier especialidad, se asciende hasta alcanzar el nivel de incompetencia".



Está claro que el perro no ha alcanzado su nivel de incompetencia, pero su amo sí. Por eso es el jefe...



Mientras que Chak terció:

jajaja pobre perro, para mi que el perro era más inteligente que su amo... ¿alguien entendio cual era la moraleja exactamente?



Alguien externo podría inferir que Tucker es el carnicero, Cabezón el perro, y Chak el dueño del perro, pero no es ese el quid del asunto. Lo que quiero remarcar es: 1) No es que el pexipato tenga un jefe incompetente. Pequeña precaución. A veces "siento" que lee mi blog. 2) Sucede más bien que el pexipato cree haber llegado a su nivel de incompetencia. 3) ¿Por qué? Porque a pesar de buscar y encontrar información, no consigue procesarla y entenderla. Es decir, hay o existe tanta información disponible en internet que literalmente hablando necesitaríamos vivir unos 100,000 años y aún así no acabaríamos de entender lo que nos interesa. Menos aún, de tratar de explicarlo a otros. 4) Por "X" razones que no voy a comentar, es decir, se ingan. Tuve necesidad de buscar acerca de un programa "TeX" y otro llamado "LaTeX". Encontré las referencias, pero a la hora de procesarlas, mi cerebro (mis menos dos neuronas, parafraseando a W) se cortocircuetearon y se declararon "en grève", igualito a los sindicalistas de la UAM. NPI de cómo aprender esta madrinola sin ayuda. Y con eso de que no le hablo a la innombrable, chin, jodido estoy, je.

P.D. Entre que escribí el borrador y hoy, llegó "alguien" a consolarme (sin albur) diciéndome: "el problema es que cada vez somos más en este mundo. Hay más competencia feroz e inescrupulosa por los (buenos, regulares y malos) trabajos. Sobre todo por aquellos en donde sin hacer nada (o poco) te pagan (N. del pexipato no sé a que se refería, sinceramente). El otro problema es que actualmente la gente debe aprender más cosas (para sobrevivir) y en menos tiempo que antes".

"Ya no me ayudes, compadre" pensé. Lo bueno que es viernes. Chance y el lunes haya superado ya la curva descendente de mi biorritmo.