Entre ladrones te veas

Llamo a un banco para averiguar dónde anda una tarjeta que no he recibido. Me informan que pasaron en tres ocasiones y nunca estuve. Les digo que nunca recibí un solo mensaje o evidencia de que pasaron. Me dicen: bueno, eso reportó la compañía de mensajería (de que nunca estuve). Ah, chingá. Como quien dice, el cliente nunca tiene la razón y menos con los ladrones de cuello blanco.

Bueno, ¿qué hago para recibirla? me dan instrucciones. Que como no estuve y no la reclamé, la tarjeta se destruyó y tendrá que cambiar el número. No manchen, como si fuera fácil memorizar (de nuevo) un número de 16 dígitos.
¿Tiene algún costo? Sí, la reposición es de $130+IVA.
Ah, cabrón. Pues mejor la cancelo. Sí, pero tengo que hablar a otro número. Siempre es así, con el cable, la luz, el teléfono, las tarjetas. Nunca te pueden transferir. Menos cancelar en ese mismo sitio. Siempre hay que remarcar a otro número. ¿Será negocio para el Slim?

Entonces me acuerdo que sobre la tarjeta domicilié el cable y otras compras a meses sin intereses. Va a estar cañón redireccionar los pagos. Todo los trámites son super complicados en este país, que está próximo a entrar al primer mundo (bueno, eso nos dicen desde hace 30 años y nos la seguimos creyendo).

Comparo los Cat's de las TDC's. "No se hagan bolas" los cat's no son los gatos, son los costos anuales totales. Así en Bancomer, el CAT es de 75.79%, en Banamex es de 56%, en HSBC de 35% promedio, en Inbursa de 26.5% (dicen). Con razón DD se da vida de magnate, le deben de pagar en Euros, con esas comisiones.

Así vemos que, anualidad $400 (más IVA; todo es más IVA; ahora entienden porqué quieren cargar el IVA a alimentos y medicinas; jijos de su); TDC adicional $200; te cobran por disposición de efectivo con saldo deudor o mismo saldo a favor, en cajero un poco menos, en sucursal un poco más; si es en cajeros de otros bancos, te cobran más; falta de pago $225; pago tardío $120; sobregiro al corte $70; reposición por robo o extravío $130 (en mi caso no fue ni robo ni extravío; fue por pendejo, no el de la compañía de mensajería, sino el pendejo del pexipato que nunca estuvo las tres veces que dice que pasó el mensajero).

Con razón, los banqueros sienten que viven en el paraíso. Con esas comisiones y esas ganancias en México, casi casi trabajan de gratis en sus casas matrices.

Alí babá es un niño de pecho comparado con estos rufianes.

Bueno, alguien dirá: a nadie lo obligan a adquirir una tarjeta de crédito. No, pus sí.