vendredi, juillet 04, 2008

Olores

Hoy iba a comentar de aquello en lo que estamos pensando todos los días. Pero no, vayan a pensar que está uno obsesionado con ello, que no puede uno dejar de pensar en ello, que uno es un pervertido.

Aunque admítanlo, todos ustedes están pensando en ello cotidianamente, bueno la mayoría. Todos los días. Salvo, algunos, los fines de semana y otros en vacaciones. Ahí ni se acuerda uno.

Aún antes de levantarse de la cama, a la hora que suena el despertador, piensa uno inmediatamente: chin, tengo que ir (o tengo que ponerme) a trabajar (en el trabajo o en casa), jeje.

Hoy no hablaré de trabajo, pues.

Hablaré de olores, aromas. Ustedes ¿pueden recordar, imaginar mentalmente los aromas? Yo no, necesito olerlo para acordarme "ah, este ya lo conozco o este no lo conozco". Y necesito oler, para recordar alguna situación o lugar pasado. Algunos dicen que podemos recordar 10 mil olores. Otros dicen que 20 mil.

A veces en carretera pasa uno al lado de un campo que se está (o lo están) quemando, y piensa uno "huele a humo o huele a quemado". Otras veces nos llega el olor de una fábrica de cuero y exclama uno "guácala". Ya no digamos los olores en la cocina o cuando huele a gas (más bien a mercaptano).

Me acordé de esto porque el otro día en el trabajo iba yo pasando al lado de agua estancada y me olió a pescado. Eso provocó inmediatamente que en mi mente recordara épocas pasadas cuando iba yo llegando a (o saliendo de) Empalme, Sonora. En ese entonces pensaba: "ya llegué" (o "ya me voy"). Ya llovió de aquello. Ignoro si siga oliendo a pescado al llegar a ese pueblo. A su vez, si me profundizo en mi interior y a pesar del olor intenso a pescado, fueron buenos tiempos, pasados, pero buenos. Hermosas, las sonorenses.

7 commentaires:

Alletta a dit…

La memoria olfativa es sorprendente, yo no puedo recordar un olor así de memoria, pero puedo recordar muchísimo con un simple aroma.
El olor del pasto recien cortado me remonta a mi época universitaria cuando me acostaba en las islas a oler la poda.
Cierto olor a arepas con queso me remonta a mis vacaciones infantiles en casa de mi abuela en Bogotá
Y el olor de una loción para caballero cuyo nombre nunca aprendí, me eriza la piel y me recuerda a mi primer amor.
Cosas de la nariz.
Buen finde pececito un abrazo

chilangoleon a dit…

calderon=hedor=fecal

Teresita a dit…

Sí, ahora que lo mencionas puedo recordar el olor de la casa de mi abuela, mi refugio de la infancia; su comida. Ay! Ya me puse a nostálgica, mejor recuerdo que tengo q estudiar, un abracito.

jess a dit…

Alguna vez leí que solemos relacionar nuestra niñez con determinados olores....
Es una lástima que el alto nivel de contaminación en mi ciudad, haya disminuído considerablmente mi sentido del olfato... ya ni los tacos de la esquina suelo diferenciar jajaja =P

jajaja... has dado besos virtuales? y esos cómo se dan o cómo es eso!! muuuaaaccckkkk!! jajaja.... estuvo súper shévere eso..... jajajaja....
Lindo fin!!

Jo a dit…

bueno, de algunos olores quisiera olvidarme, en cambio de otros dificilmente puedo deshacerme
los hombres son bastante especiales para eso de dejar huella de "olores" nada agradables jeje
cuando hago sushi huele el alga...
cuando mi abuela preparaba el boiler olia muy especial y me recuerda a ella... era un boiler antiguito tenia que quemar papel y madera...
el olor a tierra mojada me encanta
el olor a cafe de olla y eso que a mi no me gusta el cafe, el olor a mi perfume favorito...

el olor de cierto bicho raro de cuyo nombre no quiero acordarme ya casi lo olvide...

tu a que hueles... espero que no a pescado jejeje

Mati =) a dit…

eeeeeeeyyyyyyyyyy un post sin secso no es un post escrito por ti... y seguramente no hueles a pescado, o si????

besos!

white a dit…

Claro que de olores mi nariz no sabe identificar muchos.

Pero eso si parqa mi los culinarios son los mejores,,me fascina el olor de arroz recien hecho y de los pasteles, vaya soy demasiado glotona como te daras cuenta.