País de excepción

Ufff, que susto. Pensé que iban a solicitar la traducción del sketch de Fernand Raynaud. Y pues, uno aquí relax en la hora del amigo, las galletitas, el café, ...

Estaba yo pensando (raro, pero suele suceder) que este país está jodido por las excepciones. No hablo de las mordidas, tranzas o la corrupción, que también son excepciones de aplicación de la ley. Hablo de las pequeñas excepciones, que aunque son pequeñas, como joden. No puede uno practicar con el ejemplo. Con que cara les digo a mis subordinados que trabajen si me ven arranado en mi sillón leyendo el periódico. Bueno, ya les he explicado que no es que esté perdiendo el tiempo, sino que me estoy informando, pero no entienden estos nahuales jijos del Zea mays.

Sucede que la compañía emitió una propuesta para otorgar estímulos a sus trabajadores. Dizque para hacerles rico. Estímulos económicos, no vayan a pensar cochambrosamente en otra clase de estímulos. Las solicitudes de aquellos que querían sentir rico, o más bien volverse más ricos (jeje, benditos incautos) cerraba el martes a las 3 de la tarde. Pues bien, ese día viene uno con su solicitud. El pexipato (PPP): "le faltan las diez copias que pedimos". El incauto (digo, el solicitante): "n'ombre, pa'lo que me pagan, voy a andar sacando copias". Ya lo iba yo a mandar ya saben dónde, pero la jefa me echó unas miradotas, que: PPP: "bueno, vamos a hacer una excepción".

Y así fueron entregando. A las 4 de la tarde se presenta un "norteado": "aquí está mi solicitud". El PPP (rígido, apegándose a las bases y si se puede a alguien más): "se acaba de acabar. Cerramos a las 3". Nooo, ni le hubiera yo dicho. Me fue a acusar con la jefa. La jefa con voz suavecita: "recíbale". Mirándole a los ojos comprendí que o le recibía o ..................le recibía, jeje.

Ya después revisando el papelerío, me di cuenta que en las bases decía: "indique el instrumento que le gusta tocar, uno solo". Y no faltó el indisciplinado que puso: "a mí me gusta tocar las maracas y la trompeta". Otra base: "solo se aceptarán propuestas de aquellas personas de más de 30 años y menos de 28". No, pues solo por enchinchar vino uno con 29 años cumplidos.

Ya sé, la jefa querrá hacer excepciones.

Pinche país, y luego osamos exigirle al preciso que no se caiga de la bicicleta.