lundi, avril 13, 2009

How To Find A Husband

Me siento como si me hubieran atropellado sin darme cuenta de quién fue el culpable, menos pudieron tomarle las placas al desgraciado.

O como si me hubieran dado una madriza estando yo borracho. Tal vez lo estaba, y tal vez me la dieron, y por eso no recuerdo nada.

El caso es que me duele todo el cuerpo. Mismo si estornudo, me duelen las costillas, el esternón y el occipucio.

Tal vez sea alergia a regresar al trabajo.

Sigo fascinado con el canal BBC Entertainment. Hay una serie llamada "How to find a husband" ("Como encontrar un marido"), la pasan en las mañanas los fines de semana y creo entre semana.

Y no es que ande buscando marido, jaja, ni esposa. Pero los consejos de la serie ayudan a entenderse a uno mismo y al género opuesto.

La protagonista de la serie es una chava británica o escocesa, da igual, de 37 años, que parece de 45, y que según esto busca un marido para casarse. Y cuenta sus peripecias para lograrlo. Toda su vida se la ha pasado forjándose una carrera exitosa, y ahora que la ha logrado busca encontrar a la cereza del pastel, un husband.

Para empezar yo le daría dos o tres consejos. 1.- Los solteros, hombres guapos, exitosos y trabajadores, no buscan casarse. Los casados, al contrario, quisieran descasarse. O sea, de entrada, está K Brown.

2.- En el supuesto de que alguien quiera casarse, no buscamos alguien con maestría o diplomados, que hable cinco idiomas, sea exitosa, con casa, auto y cuenta bancaria en dólares (aunque estos tres últimos sí ayudarían). Buscamos a la más ulona y a la más ichona. Y si ella no pretende casarse, pues es un punto a su favor.

3.-  Esto aplica para las europeas en particular. Carajo, peínense, y pónganse algo bonito encima. Las mira uno con los pelos parados como si acabaran de levantarse. Con unas combinaciones de ropa tipo caja fuerte, que lo único que piensa uno es en salir corriendo. Y lo peor es que ellas se sienten 'soñadas'. Tal vez no sean todas las europeas o todas las británicas, pero las de esa serie están cañonas, en cuanto a su estrafalaria manera de vestir.

Ya sé que van a venir algunas bloggers a decirme, que ni que estuviera yo tan bueno o me vistiera yo tan bien, o tuviera yo carro (bueno, eso sí, jodido, pero carro al fin) o al menos unos diez mil pesos en el banco, para andar de criticón.

Bueno, ellas tienen sus blogs, ahí pueden desquitarse, jajaja. 

2 commentaires:

jess a dit…

Pues... qué te puedo decir que no se haya dicho y redicho y requete vuelto a decir o expresar ya.

Todas las mujeres traemos de fábrica el estúpido chip de idealizar el matrimonio.

Pero creo que no se puede generalizar, no todas las mujeres son de Venus, ni todos los hombres de Marte, hay mujeres profesionistas y políglotas muy hermosas y lesbianas, jaja, y hay hombres exitosos y súper atractivos que sí quieren formar un hogar.

De todo hay en la viña del Señor, y ps si no tuviera dos tesis y treinta libros enfilados, chance me animaba y veía la serie que recomiendas.... pero oops! no tengo cable, jiji...

Besos virtuales!!!!!!!
Muuuuuuaaaaaaaaaccckkkkkkk!!!!

Mafalda a dit…

...

Yo lo único que te puedo decir es que tienes el hocico lleno de razón.

Los hombres son unos animales de estímulos, sólo saben de nalgas y piernas, como tú...comprenderás jejeje.

Aquellos que deciden casarse con alguna fémina, esta tiene que ser menos que ellos, porque lueguito' se castran, y eso de no funcionar adecuadamente, está cañón.

Lo bueno es que nosotras tenemos las armas más mortíferas para los cavernícolas, estas son: nuestros encantos y la capacidad de saber administrarlos haciéndoles creer que mandan en ellos.
Aucchhh, ¡qué cosas! ¿Verdad?...

También por allí pululan algunos seres extraños, que se salen del canon establecido, que no les castra la inteligencia y la independencia; como son tan pero tan pocos, ufffff, tenemos que satisfacernos con los cavernicolitas, y hacerles creer que nos traen loquitas y sufridas...jejeje...

¡Cuídate mi Pez de las de cuarenta! Por allí se sabe que las mujeres a esa edad sufren una transformación importante. Pasan de humanas a ¡¡¡ZORRAS!!! Jajajá, y a mí me emociona ser una de ellas...

Saludetes mi Pez.

Mafalda