Las penas con pan son menos

Yo no sé si en países del primer mundo los habrá. Pero en México abundan aquellos números telefónicos (casi siempre del sector público), que alguien te los da y con cara muy circunspecta (ojo, no confundir con cara de hijo de puta. Esa es otra) te dicen: márqueme ahí a ese número y seguramente ya le tendré una respuesta (por lo general acerca de algún trámite que estás llevando a cabo).

¿Y qué sucede? jaja. Correcto. Está el pinche número o teléfono suene y suene y nadie te responde. Así como hay bandas de sicarios, otras de paramilitares, y otras más de guerrilleros, debiera haber bandas que se dedicaran a patearle los huevos a aquellos que seguramente malintencionadamente te proporcionan dichos números, sabiendo que nadie contestará y que tú te cansarás o te aburrirás.

También hay otros rompepelotas que a cada rato te llaman para ofrecerte sus servicios (de algún monopolio o transnacional) con la cantaleta: ¿ya conoce nuestros servicios? ¿por qué no se cambia con nosotros? ¿mire que tenemos la promoción este mes de que le regalamos una bolsa de malvaviscos si contrata con nosotros? La puta que los parió a esta bola de mercenarios, jaja.

Bueno, como ya es viernes pasemos a cosas más agradables.

Mmmm, no, todavía no es viernes. Carajo, con razón ando mal y de malas, je.

Jolines, que me he encontrao esto:

"Tres años de cárcel por lanzar dos zapatazos y no dar en el blanco. Además de llamar perro a un fils de chienne".

"Tres años de cárcel por arrancar la lengua a su novio. Es que besaba como Bush, perdón, quise decir como perro. Todo comenzó cuando la agresora se la mentó por no conseguir quedarse embarazada. Se la mentó y se la mordió (la lengua. Lo otro hubiese sido una tragedia)".

"Cuatro años de cárcel para dos ‘mossos’ por pegar y detener ilegalmente a un ciudadano. Los mossos alegaron que el ciudadano le tocó las nalgas a otra ‘mossa’ al parecer con aviesas y concupiscentes intenciones".

"Cuatro años de cárcel para el venezolano implicado en el ‘maletagate’. El venezolano nunca pudo comprobar que los 800,000 dólares decomisados, eran para gastos personales y comidas en su McDonald’s predilecto".

"Cuatro años de cárcel por instalar malware . Si hubiera sido bonware otro gallo le hubiera cantado".

"Siete años de cárcel para un policía que abusó de una nena. La nena, ya no tan nena de 12 años, se llamaba Lolita".

"Diez años de prisión para el piloto de un avión accidentado en Sicilia en 2005. Aquí algunos con tal de evitar ir a la cárcel prefieren embarrar el avión en Periférico casi esquina con Reforma".

"32 años de prisión a hombre que mató a dos ex-socios".

"67 años de prisión a líderes de Atenco. Pa'que aprendan a respetar al Seagull-ón".

"998 años de cárcel a ladrones de Sanborn’s. Aunque no lograron llevarse nada de valor (los ladrones. Los que llegaron después sí, pero para eso están los seguros y afianzadoras) se les comprobó que durante el período de toma de rehenes, las pseudoratas se dedicaron a ingerir todo lo que estuvo a su alcance (café, totopos, conchas, chocolates, chelas, pozole y birria). Aún no se sabe si la jueza que dictó sentencia pasó a mejor vida, y no precisamente porque haya colgado los tenis, aunque sí por el favorcito".

Por eso dicen y con razón que la justicia es ciega. Sale más barato ser narco, sicario, rata de cuello blanco, político corrupto, funcionario abusivo, abusar de una nena, matar accidentalmente o intencionalmente a dos o a diez paisanos, que liderear un movimiento social o peor aún, comerse unos chocolates.